Las practicas de corrupcion en altas esferas politicas ya no se consideran un mal necesario en Corea del Sur y Japon, sino un obstaculo para el futuro desarrollo de ambos paises, segun analistas.
Anteriormente los habitantes de Asia oriental toleraban o ignoraban las practicas deshonestas en la politica, pero esto ha cambiado y por ello los mandatarios de ambos paises destacaron la necesidad de cambio en sus mensajes de ano nuevo, este lunes.
El presidente de Corea del Sur, Kim Young Sam, prometio llevar ante la justicia a todos los culpables de corrupcion y de conjuras golpistas, delitos por los que fueron detenidos y procesados dos ex presidentes y varios destacados empresarios en los ultimos meses.
El primer ministro de Japon, Tomiichi Murayama, cuyo gobierno ha sido sacudido por una serie de escandalos financieros, se refirio a los planes de desregulacion de la economia, destinados a controlar de cerca el gasto de fondos publicos.
Ambos lideres exhortaron al entendimiento publico mientras intentan enmendar viejos errores. Deben hacerlo, opinan los analistas, ya que los escandalos amenazan con echar por la borda anos de vertiginoso desarrollo economico.
La poblacion japonesa esta harta de los politicos, comento el periodico Yomuiri Shimbun en un editorial tras la detencion del ex ministro de Trabajo Toshio Yamaguchi, el pasado mes.
Yamaguchi fue acusado de utilizar su antiguo cargo para obtener 19 millones de dolares en prestamos ilegales de los bancos Tokyo Kyowa Credit Association y Anzen Credit Bank, actualmente cerrados, para ayudar a familiares a establecer empresas que hasta hace poco producian enormes beneficios.
El ex ministro, vicesecretario del reformista Partido de la Nueva Frontera, continua negando las acusaciones, pero permanece culpable ante los ojos de una ciudadania acostumbrada a la corrupcion, senalo el diario Asahi Shimbun.
Un escandalo aun mayor se produjo en relacion a la sucursal neoyorquina del Daiwa Bank. La semana pasada, una corte de Nueva York acuso al ex presidente del banco, Masahiro Tsuda, de estafa a la Reserva Federal de Estados Unidos mediante el ocultamiento de un deficit de 1.120 millones de dolares.
Los escandalos asestaron un duro golpe a la imagen internacional de Japon, mientras los japoneses acusan al Ministerio de Finanzas de no establecer controles adecuados para prevenir actividades ilegales.
La renuncia del viceministro de Finanzas, Kyosuke Shinozawa, refleja la convulsion causada por el escandalo de los prestamos ilegales.
Shinozawa, cuya renuncia se hara efectiva el viernes, afirmo que su decision no se debe a falla alguna de su parte en relacion a ningun "incidente" en particular.
Se preve que el gobierno realizara cambios dentro del ministerio para poner fin a los escandalos, pero la medida podria resultar inaceptable en un pais donde el desempleo alcanzo en noviembre un indice de 3,4 por ciento, uno de los mas altos de la posguerra.
La politica y los negocios mantienen estrechos lazos en la sociedad japonesa, segun Tokyo Business Today, una prestigiosa revista de economia.
"Los politicos que realizan 'favores' a empresas no solo se benefician con dinero. El apoyo electoral juega un importante papel en la relacion, ya que en las campanas, las companias movilizan gente, material y dinero para apoyar al politico que mas las favorece", publico la revista.
La ola de corrupcion es igualmente desenfrenada en Corea del Sur, donde fueron detenidos el ex presidente Roh Tae Woo y su predecesor, el general Chun Doo Hwan, por corrupcion e instigacion del golpe militar de 1979, que finalmente los llevo al poder.
Roh, primer presidente electo de Corea del Sur, considerado como el principal promotor de la reforma democratica tras decadas de gobierno militar, se encuentra en prision por acumular un fondo secreto para actividades ilegales de 6,5 millones de dolares, obtenidos de grandes empresarios.
"El encarcelamiento de estos politicos constituye un duro golpe para la confianza de la nacion, pero los surcoreanos confiamos en que la actual crisis pueda ser util para limpiar el viejo sistema", manifesto la analista Mary B. Kim. (FIN/IPS/tra-en/sk/cpg/ml-jc/ip/96)
