El rey Fahd de Arabia Saudita parece haber tranquilizado a los mercados financieros "maniobrando" con su sucesion, al traspasar provisoriamente el poder a su medio hermano y principe heredero Abdullah Abdul Aziz.
La noticia del traspaso no produjo grandes cambios en los mercados financieros, que abrieron esta semana con el petroleo a niveles apenas superiores a los normales. Asi, el precio de referencia del crudo Brent aumento tan solo uno por ciento para situarse en 18,50 dolares.
Abdullah, de 71 anos, es considerado un estadista "confiable" que, segun analistas financieros, proseguiria la politica de alta produccion de petroleo a precios bajos de Fahd, pese a no contar con el apoyo total de Estados Unidos.
Sin embargo, la "maniobra" de Fahd, pese a tranquilizar a los mercados, aumento los persistentes rumores relativos a la lucha por el poder dentro de la familia real.
El principal rival de Abdullah es su hermanastro Sultan, quien, al igual que Fahd forma parte de los llamados "siete Sudairi", es decir los hijos que el fundador de Arabia Saudita, el rey Abdul Aziz al-Saud (1932-1953), tuvo con Hassa bint Ahmad al-Sudairi.
Pese a su corta historia, iniciada en 1932, Arabia Saudita -que posee 25 por ciento de las reservas mundiales probadas de petroleo y es el principal exportador de crudo, con ocho millones de barriles diarios- ya vivio situaciones comparables.
En 1958, el rey Saud ibn Abdul Aziz al-Saud (1953-1964), que no lograba administrar adecuadamente las finanzas publicas, nombro al principe heredero, Faisal ibn Abdul al-Saud, primer ministro y le transfirio gran parte de sus poderes politicos.
Esta situacion duro dos anos, cuando Saud volvio a nombrarse primer ministro, para luego verse obligado a abdicar, en 1964, en favor de Faisal.
Por lo tanto, si Fahd se recuperara de su embolia cerebral y decidiera volver a ejercer plenamente sus poderes, el traspaso en favor de Abdullah no se lo impediria en absoluto.
No obstante, mas alla de este traspaso provisorio, la sucesion de Fahd esta lejos de haberse resuelto. Segun la legislacion promulgada en 1992, el principe heredero esta autorizado a asumir el poder en caso de muerte del rey, pero el sucesor definitivo debe ser elegido por un comite de principes.
En otras palabras, el titulo de principe heredero no garantiza a Abdullah que luego se lo designe para ocupar permanentemente el maximo cargo politico del reino.
Este mecanismo tenderia a confirmar que un vuelco radical en la politica interna o externa de Arabia Saudita -fuertemente influenciada por sus estrechos vinculos con Estados Unidos- es poco probable.
De haber tenido posibilidades de cambiar algunas orientaciones de Riad -incluso en el marco de la "camisa de fuerza" que son los vinculos con su "protector" estadounidense- Abdullah probablemente hubiera tratado de utilizarlas.
En efecto, el principe heredero lidera el sector mas tradicionalista y nacionalista de la familia real, mientras que Fahd y Sultan son mas proestadounidenses.
Ambos sectores disienten en materia de politica militar y en lo relativo al ritmo del desarrollo economico.
Estas diferencias se vieron con relativa claridad durante la llamada crisis del Golfo, consecutiva a la invasion de Kuwait por tropas iraquies, en agosto de 1990.
Contrariamente a Sultan, que apoyo con entusiasmo el despliegue de tropas estadounidenses en Arabia Saudita -desde donde se lanzaron gran parte de las ofensivas contra Iraq en 1991-, Abdullah dio una imagen de indiferencia.
Sin embargo, desde entonces, el principe heredero hizo grandes esfuerzos para tratar de "construirse" una imagen mas proestadounidense y, actualmente, sabe muy bien que cualquier desacuerdo con Washington le seria perjudicial en la lucha por la sucesion con Sultan. (FIN/IPS/tra-en/dh/rj/dm/ip/96)