La palabra empenada por la rebelde Union Nacional por la Independencia Total de Angola (UNITA), al anunciar que reanudara el proceso de acuartelamiento de tropas en areas especiales, ha sido tomada con cierto escepticismo por los funcionarios de la Organizacion de las Naciones Unidas (ONU).
"?Acaso pueden hablar en serio?", fue el comentario mas oido en Luanda ante la promesa de UNITA de estacionar 30.000 soldados, en cuatro areas de seguridad especialmente creadas, antes del 20 de este mes. "Debe ser una trampa", dijo un alto funcionario de la ONU.
Sin embargo, UNITA parece estar de veras suavizando su forma de actuar en este proceso de paz largamente entorpecido.
En un comunicado emitido el primer dia del nuevo ano por su cuartel general de Bailundo, UNITA ofrecio pleno apoyo a las organizaciones no gubernamentales que trabajan en las areas que estan bajo su control, reconociendo tacitamente los problemas del pasado.
Los rebeldes parecen haber suspendido la politica de no cooperar con los funcionarios de la ONU que supervisan el proceso de paz, adoptada a principios de diciembre. Incluso algunos dirigentes de UNITA hablan de moderar el tono de la radio del movimiento, llamada Vorgan.
Los observadores entienden que el comportamiento de UNITA mejora siempre que el Consejo de Seguridad de la ONU esta cerca de adoptar alguna resolucion, tal como en el momento presente, a pocas semanas de la renovacion, en febrero, del mandato de la mision de la organizacion mundial en Angola.
El movimiento rebelde, dirigido por Jonas Savimbi, celebrara una "conferencia politica" especial del 16 al 18 de este mes, en su baluarte de Bailundo, en la meseta central.
Ya se estan haciendo preparativos para una cuarta reunion entre entre Savimbi y el presidente Jose Eduardo dos Santos, que probablemente se realizara fuera de Angola.
Los dirigentes de UNITA han advertido de que Savimbi no tiene planes de llegar a Luanda antes de que termine este mes. El presidente de Portugal, Mario Soares, lamento durante su visita a esta capital, la semana pasada, no haber conseguido persuadirle de que viniera a la ciudad para mantener una entrevista.
Sin llegar a la exageracion de hablar de un "factor Soares", para explicar la notoria mejoria del ambiente politico, no hay duda de que la presencia del presidente portugues en Luanda contribuyo a enfriar el estado de cosas.
A pesar de que Soares no se desplazo a Bailundo, UNITA se refirio a el con respeto, diciendo que es "un amigo personal de Jonas Savimbi".
La atencion politica se centra nuevamente en las tratativas militares entre los dos bandos, que vuelven a activarse a pesar de la ausencia del jefe del estado mayor de UNITA, conocido como el general "Ben Ben".
La agenda de la reunion es previsible: el acuartelamiento, la composicion futura de un nuevo y reformado ejercito nacional, la liberacion de prisioneros y el despido de los mercenarios.
El gobierno ha dejado en claro que ahora corresponde a UNITA cumplir con sus obligaciones en el proceso de paz.
La semana pasada se efectuaron dos iniciativas bien organizadas y publicitadas por el gobierno: el acuartelamiento de la Policia de Intervencion Rapida (PIR) y la retirada de la organizacion mercenaria sudafricana llamada Executive Outcomes, dedicada al entrenamiento del ejercito.
Durante mucho tiempo, UNITA ha exigido la disolucion o la neutralizacion de la PIR, pero los "Ninjas" han mantenido hasta ahora una activa presencia en las calles, patrullando las ciudades con sus pesadas armas.
Al contrario que la policia regular -ineficaz y corrupta-, la PIR tiene reputacion ganada por su disciplina de hierro. Se distingue por sus uniformes negros o azul oscuro, los primeros reservados a los comandos especiales.
El gobierno sostiene, sin embargo, que el acuartelamiento de la PIR y la salida de los mercenarios sudafricanos, el jueves pasado, son dos ejemplos a seguir por UNITA. (FIN/IPS/tra-en/cs/oa/arl/ip/96)