Los empresarios mexicanos pidieron el "estricto cumplimiento" del Tratado de Libre Comercio de America del Norte (TLC), al comenzar hoy en Washington consultas bilaterales entre los gobiernos de Estados Unidos y Mexico.
Las diferencias surgidas entre los dos paises, socios del TLC junto a Canada, se relacionan con trabas estadounidenses a la liberacion fronteriza reciproca del transporte de carga automotor y al comercio de productos agropecuarios mexicanos.
La Camara Nacional de la Industria de la Tranformacion (Canacintra) estimo violatoria del TLC la decision unilateral de Estados Unidos que prohibe el ingreso de camiones mexicanos desde el 18 de diciembre, fecha en que debia abrirse la frontera.
Canacintra aclaro en un comunicado que considera inconveniente plantear modificaciones o enmiendas, ya que ello sentaria el precedente para que todos los problemas neuralgicos entre ambas paises se resuelvan dentro del TLC.
Isaias Canas, de la firma transportista Compex, apelo a los "buenos oficios" del gobierno mexicano para superar el problema "lo mas pronto posible, porque de lo contrario la controversia operativa se volveria politica".
La decision estadounidense responde a reclamos de los transportistas de ese pais y se basa en la supuesta obsolescencia de la flota mexicana, asi como en la tambien presunta falta de profesionalismo de sus camioneros.
El capitulo del autotransporte fue una de las negociaciones mas arduas del TLC, que puso en marcha el 1 de enero de 1994 una zona de libre comercio con 375 millones de habitantes y un producto anual de siete billones de dolares.
Entre los factores que inciden en el problema esta el hecho de que 1996 es un ano electoral en Estados Unidos y el gobierno del presidente Bill Clinton, que busca la reeleccion, necesita buenas relaciones con sindicatos importantes como el camionero.
Paradojicamente, un sector de los camioneros representado por la Camara Nacional del Autotransporte de Carga de Mexico (Canacar) pidio que se postergara la aplicacion del TLC en el sector, tal como lo hizo de hecho la autoridad estadounidense.
Argumento que los autotransportistas mexicanos no estan en condiciones de competir con los estadounidenses por falta de creditos y estimulos fiscales para renovar su equipo.
Otro asunto a considerarse en las reuniones bilaterales es la decision unilateral estadounidense de fijar cuotas semanales en vez de estacionales a la importacion de tomates mexicanos, lo que impide colocar oportunamente el producto y disminuye las ventas.
De esta forma, Estados Unidos busca restringir el acceso del tomate mexicano a su mercado, ya que niega a los exportadores de Mexico la oportunidad de aprovechar por completo la cuota establecida en el TLC para el lapso entre el 15 de noviembre y el 28 de febrero.
La medida impide que una porcion no utilizada de la cuota semanal se use en semanas posteriores, imponiendo aranceles sobre el excedente de la cuota semanal aun cuando no se rebase el monto total para la temporada correspondiente.
La secretaria de Comercio de Mexico senalo en un comunicado que tanto en lo relativo a los camiones como en lo referente al tomate la conducta del gobierno estadounidense es violatoria del TLC e incompatible con sus clausulas.
A su vez, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), que nuclea a un conjunto de camaras industriales y comerciales, rechazo las medidas unilaterales estadounidenses y pidio el cumplimiento de los compromisos establecidos en el TLC.
El presidente del CCE, Hector Larios, nego que debido a los conflictos existentes se encuentre en peligro la continuidad del tratado y rechazo todo intento de modificarlo.
Al comentar la influencia de la coyuntura electoral estadounidense en los problemas surgidos, gerardo Thurlow, presidente de la Coordinadora de Organismos Empresariales de Comercio Exterior, la califico de "especulacion conjetural".
Thurlow dijo que en las consultas bilaterales entre Estados Unidos y Mexico se intentara resolver los conflictos sin demora, ya que de llevarse a cabo todo el procedimiento que contempla el TLC, incluyendo la formacion de paneles de expertos, el proceso podria tardar de seis a siete meses.
De no llegarse a un acuerdo en las consultas bilaterales, que concluiran este viernes, Mexico demandara que se reuna la Comision de Libre Comercio del TLC, su maxima instancia administradora, en los proximos 15 dias.
Si la comision tampoco resuelve el problema se pedira el establecimiento de instancias arbitrales formados por expertos de los tres paises miembros. Eventualmente, si el dictamen le es favorable, Mexico puede demandar "resarcir el dano y perjuicio economico causado" durante el tiempo que dure el conflicto. (FIN/IPS/emv/ag/if/96)