A medida que se acerca el 31 de diciembre de 1999, fecha en que Estados Unidos debe retirarse del Canal de Panama, la polemica sobre que hacer con los 30.000 millones de dolares en obras y tierras que recibira este pais gana en intensidad.
El punto de discrepancia mayor aparenta ser el futuro desarrollo de zonas procesadoras para la exportacion, que se habrian negociado con algunos paises asiaticos en una reciente gira realizada por el presidente Ernesto Perez Balladares.
El administrador de la Autoridad de la Region Interoceanica (ARI), el ex presidente Nicolas Ardito Barletta, sostuvo que el futuro del pais depende de las riquezas que genere la inversion extranjera en ese lugar.
Tras senalar que solo "hay que tomar en cuenta el beneficio que se logra", Barletta preciso que si las inversiones foraneas traen empleo, capacitacion, compra de insumos y tecnologia eso superaria con creces cualquier costo politico.
La postura de Barletta ambiento una dura reaccion de varios expertos y economistas panamenos, que reclaman "dar rostro humano" a los programas de uso de los bienes que reviertan al pais dentro de cuatro anos, asi como evitar caer en "un nuevo enclave extranjero".
El ex subadministrador del canal Fernando Manfredo opino que, ademas de atraer inversiones que generen empleos, tecnologia y compras en el comercio y la industria local, como plantea Barletta, "hay que dar un uso social" a los bienes recibidos, para que la poblacion no quede al margen de su desarrollo.
Para el economista Oscar Garcia, miembro del Centro de Investigacion Economica de la estatal Universidad de Panama, tal cual estan planteadas las cosas podria repetirse la situacion de enclave extranjero que ha tenido la zona del canal desde 1903.
"El Estado debe tener claro que tipo de actividades se van a realizar en esas areas y como va a incorporarlas al desarrollo total del pais", asi como adoptar "una mentalidad mas amplia en lo que se refiere a la satisfaccion de las necesidades de los ciudadanos".
Anadio que por ahora todo indica que la principal inversion seran las companias dedicadas a la maquila, en especial las de origen asiatico, cuyo "unico efecto directo" sobre el pais seria la generacion de puestos de trabajo.
En ese sentido alerto sobre el peligro de implantar areas industriales en las que se paguen salarios por debajo de los niveles medios del pais. Aunque ello ayudaria a resolver el problema del desempleo, "mantendria latente el de la pobreza", que afecta a mas de 50 por ciento de la poblacion.
A su juicio, el programa de uso de las areas revertidas debe basarse en un equilibrio entre la inversion externa e interna y en la generacion del ahorro nacional y su canalizacion hacia las actividades productivas en la region canalera.
En caso contrario "pudiera ser que esas areas queden como apartadas del resto del pais y se repita la historia", preciso Garcia, tras lo cual advirtio que "ese es un riesgo que el gobierno no debe correr".
"Mientras Panama dependa casi exclusivamente de recursos externos las bases del desarrollo seran muy endebles", subrayo el investigador.
Entre tanto, el ex contralor general Jose Chen Barria senalo que la falta de recursos, tanto del sector estatal como privado local, para abordar grandes inversiones coloca al pais ante la disyuntiva de atraer la inversion extranjera o quedar estancado.
Aunque en ese aspecto coincide con la postura oficial, Chen Barria advirtio que "el tipo de negociacion, estructura y forma en que se realice la inversion sera lo que garantizara si rinde o no frutos para los panamenos". (FIN/IPS/sh/dg/ip/95