Japon tuvo una vez el orgullo de ser uno de los paises mas seguros del mundo, pero un alarmante aumento de la criminalidad en los ultimos dos anos ha sacudido fuertemente la confianza publica.
Osamu Tomita recordo nostalgico la epoca en que podia dejar su joyeria y relojeria sin temor de ser atacado ni preocupacion de que alguno entrara a robar por la noche.
"Las llaves que llevaba eran suficientes para salvaguardar mi negocio. Podia confiar plenamente en mis clientes", dijo ese hombre de negocios de Tokio, de 56 anos.
Sin embargo, con el alto indice de criminalidad de los ultimos tiempos, Tomita ya no esta tan seguro y tampoco corre riesgos porque cierra la tienda mas temprano y va al banco para depositar los ingresos del dia que antes podia dejar tranquilamente en el negocio.
Tomita no lleva un arma para protegerse. Bajo la ley nipona de control de armas de fuego, la mas severa del mundo, la posesion de un revolver o balas es punible con abultadas multas y cualquiera sorprendido usando un arma contra un semejante arriesga la prision perpetua.
En efecto, incluso la policia japonesa, excepto escuadras especiales, no tiene permiso de usar sus pistolas, que son tan pequenas que a menudo resultan inservibles contra las sofisticadas armas del sindicato del crimen.
Como resultado, la confianza del pueblo japones en la habilidad de las fuerzas de seguridad se ha deteriorado considerablemente. Las camareras de los bares llevan armas para protegerse y los trenes subterraneos cuentan con vigilancia privada de civiles.
La Agencia Nacional de Policia informo que el ano pasado fueron requisadas 1.131 armas de fuego. Los homicidios cometidos con pistolas se incrementaron en los ultimos meses. Mas de un centenar de incidentes a balazos y 49 muertes por armas de fuego tuvieron lugar este ano con un 80 por ciento de aumento en relacion a 1990.
La violencia armada estuvo antes restringida a los Yakuza, la version japonesa de la mafia, pero en los ultimos tiempos, mas y mas japoneses ordinarios resultan victimas o autores de tiroteos.
Los choques armados entre bandas rivales continuan a la cabeza de los tiroteos registrados en el pais, pero tambien se ha producido un aumento en los robos y las muertes por venganza perpetradas por ciudadanos comunes.
Un crimen que hizo estremecer los cimientos de la sociedad japonesa ocurrio a comienzos de este ano cuando el jefe de policia de la nacion, Takaji Kunisaki, fue atacado en pleno dia por pistoleros supuestamente miembros de Aum Shinrikyo, un tenebroso culto vinculado al atentado de marzo contra el sistema de trenes subterraneos mediante el uso de gas nervioso.
Kunisaki, que estaba a cargo de la investigacion sobre la apocaliptica secta, fue baleado varias veces cuando salia de su casa de departamentos. La falta de seguridad de Kunisaki hizo muy facil la ejecucion del crimen a sus atacantes, que luego escaparon montados en bicicletas.
"El incidente demuestra que Japon esta completamente impreparado para afrontar una seria ola de crimenes", declaro el experto Iroaki Iwai. "Cobijados durante anos en lo que creimos que era nuestra segura sociedad homogenea, ahora hemos sido despertados por la amarga realidad".
En un intento de anticipar lo que policias y expertos criminologos consideran una tendencia creciente, el gobierno ha endurecido aun mas las leyes sobre portacion de armas.
En septiembre, a instancias de la policia, los legisladores aprobaron nuevas leyes por las cuales es ilegal disparar armas o recibirlas por correo. Los infractores afrontan penas de carcel de dos a cinco anos.
La policia japonesa tambien ha comenzado a vincularse con sus similares de otros paises, cuya cooperacion ahora considera crucial para afrontar la actual ola de crimenes.
La semana pasada tuvo lugar en Tokio una reunion de autoridades policiales de 12 paises, incluyendo China, Estados Unidos, Malasia y Sudafrica, que concluyo con una declaracion pidiendo a todas las organizaciones policiales que eviten la proliferacion de armas de fuego en sus jurisdicciones.
La policia nipona senalo que el 90 por ciento de las armas en Japon son contrabandeadas del exterior. Estados Unidos, China, Filipinas, Corea del Sur, Rusia y Tailandia son las principales fuentes de abastecimiento de las bandas japonesas.
Iwai afirmo que el contrabando de armas es un negocio altamente lucrativo en Japon, porque un revolver norteamericano Colt se vende en mas de 3.000 dolares en el mercado clandestino, 10 veces mas que en Estados Unidos.
La recesion economica en Japon solamente ha alentado el comercio de armas. Los marineros estan trayendo armas mediante el pago de comisiones, incluso desde Sudafrica.
Los pistoleros tambien venden sus arsenales para apoyar a las organizaciones que se han visto perjudicadas por las nueves leyes anticrimen y la falta de reclutas.
Los criminologos apuntaron que los pistoleros cuentan con miles de armas de fuego. "Tratar de controlarlos va a resultar muy duro", dijo Iwai, quien previno sobre las actuales tendencias e indico que Japon asistira todavia a un mayor aumento de la criminalidad organizada en los proximos anos. (FIN/IPS/tra- en/sk/lnh/ego/ip).
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