El gobierno de Brasil enfrenta una nueva tormenta politica, esta vez a causa de incentivos crediticios y fiscales que decreto para promover una concentracion del sistema bancario y su restructura.
La fusion o incorporacion de bancos es estimulada mediante la concesion de creditos oficiales a largo plazo a intereses mas bajos que los del mercado.
Ademas, se dispuso un descuento tributario de hasta 30 por ciento al ano a las instituciones que asuman las perdidas de los bancos que adquieran.
La "medida provisional" (decreto vigente por un mes, que puede ser reiterado pero requiere aprobacion parlamentaria para convertirse en ley permanente), firmada por el presidente Fernando Henrique Cardoso el 4 de noviembre, ha provocado polemicas incluso dentro del gobierno.
La norma concede "privilegios inaceptables" a los bancos, segun politicos opositores y oficialistas.
Los incentivos son un premio a la irresponsabilidad de los banqueros que siempre han sido privilegiados y ganaron mucho en el largo periodo de elevada inflacion, acuso el influyente senador Jader Barbalho, del mayoritario Partido del Movimiento Democratico Brasileno, que integra el gobierno.
En cambio, el presidente del Banco Central, Gustavo Loyola, ejecutor del Programa de Estimulo a la Reestructuracion y al Fortalecimiento del Sistema Financiero Nacional (Proer), niega que el decreto favorezca a "banqueros fracasados".
Segun Loyola, se trata de adoptar "medidas preventivas" en defensa de la salud del sector financiero y del dinero que la poblacion deposita en los bancos. Con la quiebra, los primeros perjudicados son quienes tienen ahorros en la institucion, argumento.
Entre las medidas adoptadas se cuenta un "seguro-deposito", que garantiza los depositos en bancos quebrados hasta un maximo de 20.000 reales (20.700 dolares).
El gobierno decidio poner en marcha el programa, tras verse obligado a la liquidacion de 15 pequenos bancos e intervenir varias instituciones estatales, provinciales y privadas, entre las cuales figura una de gran tamano, el Economico, despues de la drastica reduccion de la inflacion, en julio de 1994.
La intervencion en el Banco Economico dejo sin su dinero a centenares de miles de personas y represento un trauma en la economia del estado de Bahia, donde era una de las principales instituciones financieras.
El sistema bancario brasileno acompana la tendencia mundial de concentracion y reduccion del numero de bancos, segun los economistas. Con la estabilizacion economica, que elimino las ganancias inflacionarias, el proceso en Brasil se hizo mas rapido.
La aprobacion de la constitucion vigente en 1988, que elimino restricciones para la creacion de instituciones financieras, produjo una gran proliferacion de bancos. Desde entonces fueron fundados mas de 130, lo que elevo su numero total a 240, con alrededor de 27.000 locales en todo el pais.
El proceso de reduccion comenzo antes de esa explosion, pero se acelero con el "plan real" (de estabilizacion economica), vigente desde julio del ano pasado. Los expertos calculan que las fusiones e incorporaciones pueden reducir el numero de bancos a menos de la mitad.
La participacion del sector financiero en el producto interno bruto debe caer de 17 por ciento a que ascendio durante los 15 anos en que se registro inflacion elevada a menos de diez por ciento, como en los primeros anos de la decada del 70.
Las dificultades del sector se hicieron particularmente evidentes el mes pasado, despues de que el Unibanco, el septimo banco del pais por su magnitud, emprendio negociaciones por la compra del Nacional, que ocupa el octavo lugar en la nomina.
Pero el programa costara entre 10.000 y 12.000 millones de dolares al Tesoro Nacional, "dinero del contribuyente", advirtio el diputado Delfim Netto, quien fue varias veces ministro de Hacienda y de Planificacion durante el regimen militar (1964- 1985).
Ese costo seria mucho menor si las medidas hubieran sido adoptadas cuatro meses antes, acuso el economista y politico conservador.
Los costos seran duros, especialmente para los empleados bancarios. El sector perdio cerca de 200.000 puestos de trabajo desde 1990, por lo que actualmente existen hoy poco mas de 600.000 funcionarios en todo el pais.
El presidente de la Central Unica de Trabajadores (CUT), Vicente Paulo da Silva, preve despidos masivos. Los bancarios tendran que buscar otro tipo de trabajo, recomendo.
Ademas de la reduccion en el numero de bancos, la informatizacion, el avance de la tecnologia y los cambios de gestion provocan excedentes de personal. (FIN/IPS/mo/mj-dg/if/95
