MOLDAVIA: Protestas estudiantiles amenazan con desatar crisis

Protestas masivas de miles de estudiantes en demanda de la renuncia del gobierno en Chisinau, la capital de Moldavia, podrian desatar una crisis en la ex republica sovietica, advirtieron analistas en esta ciudad.

Los manifestantes, que desde el 19 de octubre paralizan el trafico en Chisinau, exigen un cambio de gobierno y el pago inmediato de haberes atrasados a funcionarios publicos y pensionistas, la introduccion en los programas escolares de la historia de Rumania y que la lengua de Moldavia se denomine "rumano".

Alrededor de 64 por ciento de la poblacion de Moldavia es de ascendencia rumana, mientras las lenguas moldava y rumana son practicamente iguales.

Oleg Cherney, presidente del comite de la huelga, afirmo que el gabinete del Partido Agrario Democratico (PAG), que "hace seis meses rechaza estas demandas, debe renunciar".

El breve periodo de estabilidad politica iniciado el ano pasado con el gobierno del PAG finalizo a comienzos de este ano cuando el presidente de Moldavia, Mircha Snegur, acuso a su propio partido de traicionar los intereses del pais y creo el grupo politico Renacimiento.

El PAG acuso a Snegur de manipular a los estudiantes para lograr la unificacion con Rumania, a la cual se opone el partido en el gobierno, integrado por profesionales y academicos formados en la ex Union Sovietica, ahora comunistas "reformados".

El diario Segodnya de Moscu menciona como la fuerza subyacente a las manifestaciones al tercer principal actor politico en Moldavia, el Frente Nacional Democristiano, viejo enemigo del PAG que tambien respalda la union entre Chisinau y Bucarest.

La batalla entre los partidos que ahora libran en las calles los estudiantes deja al descubierto las interrogantes fundamentales del futuro de Moldavia.

La primera es el cambio de un regimen parlamentario a uno presidencialista, favorecido por Snegur, y la segunda se refiere a la posible integracion a Rumania.

Quienes se oponen a denominar "rumano" a la lengua moldava consideran la medida como el primer paso hacia la perdida de la identidad nacional.

"Ahora una lengua, despues, dos Estados 'rumanos', y finalmente la unificacion de los dos paises", advirtio Dumitru Motspan, vicepresidente del parlamento moldavo. (FIN/IPS/tra-en/ss/HvdB/lp/ip/95

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