El capitulo de las disputas entre Brasil y Argentina por el comercio de vehiculos se reanudo con el fallo de la Organizacion Mundial de Comercio (OMC) contra las cuotas de importacion fijadas por Brasilia hace cuatro meses.
Autoridades y empresarios del sector no tienen dudas de que, sin las cuotas y con la rapida reduccion arancelaria programada, habra nueva invasion de automoviles importados en Brasil el proximo ano, repitiendo el desbalance comercial que forzo al gobierno de este pais a las fuertes medidas adoptadas en junio.
El arancel caera del 70 por ciento actual a 62 por ciento en enero y 30 por ciento en abril. Luego, segun lo acordado en el Mercado Comun del Sur (Mercosur), bajara dos puntos cada ano, hasta llegar al arancel externo comun de 20 por ciento en el ano 2001.
Las importaciones desde Argentina, exentas de cuotas y de aranceles, podran registrar un rebrote, incluso porque la recesion en ese pais obliga a sus montadoras a buscar afanosamente posibilidades foraneas de ventas.
Hay que establecer limites para las importaciones, tal como lo hacen Japon y Corea, dos paises que acusaron a Brasil de violar las reglas del comercio mundial al imponer las cuotas, senalo Ivan Fonseca da Silva, presidente de la empresa Ford de Brasil, admitiendo la menor productividad actual de la industria local.
Tales argumentos, corroborados por otros dirigentes industriales, indican que el sector presionara por condiciones favorables a una mayor competitividad de las montadoras instaladas en Brasil.
Otro temor es que, ademas de las cuotas, la OMC condene los estimulos a inversiones de la industria automotriz, que incluye la posibilidad de importar equipos y componentes con arancel de solo dos por ciento y favorece exportaciones.
Desde la adopcion de las cuotas e incentivos, el 12 de junio, las empresas Volkswagen, Renault, Mercedes-Benz y Peugeot anunciaron la instalacion de nuevas fabricas de automoviles, camiones, autobuses y motores en Brasil, con inversiones que superan 2.000 millones de dolares.
El cambio de reglas puede devolver a Argentina algunas condiciones mas atractivas para las transnacionales que miran al mercado ampliado por el libre comercio en el Mercosur y a una base de produccion mas ventajosa para exportaciones a otras regiones.
El canciller Luiz Felipe Lampreia anuncio que el area economica del gobierno brasileno ya discute con el sector alternativas para un regimen automotor que mantenga la capacidad de "atraer inversiones extranjeras".
La Asociacion Brasilena de Empresas Importadoras de Vehiculos Automotores (Abeiva) se dispone a autolimitar sus compras, para evitar nuevas turbulencias y perdidas en el sector.
El escarmiento aun les duele a los empresarios en forma de mas de 50.000 vehiculos importados hace meses y dejados en los puertos, porque el arancel de 70 por ciento hizo inviable su venta en el mercado interno y la disyuntiva para la autoridad fiscal es reexportarlos o perderlos.
Las cuotas permitian la importacion de mas 150.000 vehiculos, mitad del total importado este ano hasta el 12 de junio, pero la ministra de Industria y Comercio, Dorothea Werneck, reconocio que no se llegara a ese limite.
El arancel elevado y la contraccion del consumo, provocada por duras limitaciones al credito, obligaron a una fuerte reduccion tanto de las importaciones como de la produccion interna, ante las numerosas unidades excedentes en los puertos y las explanadas de las montadoras.
Las cuotas fueron inocuas, admitio el secretario de Comercio Exterior, Frederico Alves.
Pero la decision de la OMC adoptada el sabado pasado puede echar abajo el castillo armado para reequilibrar la balanza comercial brasilena y atraer inversiones, que provoco una crisis con Argentina y exigio la intervencion del presidente brasileno Fernando Henrique Cardoso.
Argentina se ve asi fortalecida para la inevitable renegociacion de un acuerdo para el sector automotor y las necesidades economicas de los dos paises podria llevar a nueva confrontacion.
Las montadoras instaladas en Argentina enfrentan una caida de 30 por ciento en sus ventas. Brasil, que logro un pequeno superavit desde julio tras un comercio deficitario de noviembre a junio debido principalmente a la importacion de vehiculos, teme volver a la situacion anterior.
Ademas, desarrolla una estrategia para convertirse en uno de los cinco mayores productores de vehiculos en el mundo, con la meta de 2,5 millones de unidades en el ano 2000.
Sin llegar a esa produccion es imposible hacerse competitivo, sentencio el presidente de la Asociacion Nacional de Fabricantes de Vehiculos Automotores (Anfavea), Silvano Valentino, y esto exige muchas inversiones. (FIN/IPS/mo/ag/if/95
