IRLANDA DEL NORTE: Unionistas bloquean proceso de paz

Un ano despues de entrar en vigor el cese del fuego proclamado por los grupos paramilitares protestantes pro-britanicos de Irlanda del Norte, que durante 25 anos lucharon contra los nacionalistas del IRA, los catolicos comunes ya no temen ser asesinados cuando andan por las calles de Belfast.

A lo largo de un cuarto de siglo, el IRA (Ejercito Republicano Irlandes) mantuvo una lucha armada en defensa de la minoria catolica y por reintegrar los seis condados a Irlanda, mientras la mayoria protestante continuo proclamando su adhesion a Gran Bretana, produciendose miles de bajas en ambos bandos.

"El cese del fuego llego muy tarde para mi", dijo Emily McCabe, cuyo hijo Patrick, de 23 anos, fue muerto por los "leales" protestantes justo antes del cese del fuego que estos anunciaron el l3 de octubre de 1994.

"Sin embargo, de todas formas estoy contenta de que ya no haya fuego, de que nadie mas sea baleado", agrego.

McCabe vive en un distrito de Belfast conocido como "el triangulo de la muerte", un pequeno suburbio catolico llamado New Lodge, al norte de la ciudad, donde fueron asesinadas mas de 600 personas en los ultimos 25 anos.

En contraste con el estado de "paz" en que se vive desde que se puso en practica el cese del fuego -por parte del IRA el 1 de septiembre de 1994 y por parte de los leales el 14 de octubre siguiente-, es poco el progreso politico verificado.

El gobierno britanico aun no ha anunciado una fecha para el comienzo de las conversaciones entre todas las partes, pese a sus promesas de que habria negociaciones politicas a los pocos meses de implantado el cese del fuego, despues de un "periodo de descontaminacion", en palabras del primer ministro John Major.

"No podemos tener conversaciones entre todas las partes sin todos los partidos", dijo la semana pasada Michael Ancram, ministro britanico responsable del desarrollo politico en Irlanda del Norte.

El Partido Unionista del Ulster (UUP), primer partido de la mayoria protestante, sostiene que no va sentarse a negociar con la rama politica del IRA, el Sinn Fein, a menos que los nacionalistas entreguen las armas.

Los britanicos insisten en que el IRA haga "un gesto" en cuanto a las armas, pero no hay certeza de que los partidos unionistas vayan a aceptar las negociaciones, incluso en presencia de un gesto de ese tipo.

Algunos miembros del UUP no se conforman con la entrega de las armas y han demandado la ruptura de la estructura de mando del IRA. Por su lado el Partido Unionista Democratico, de linea dura, ha dicho que no conversara con el Sin Feinn en ninguna circunstancia.

Por la parte opuesta, el IRA entiende que la entrega de las armas seria un signo de derrota, y que ellos no han sido derrotados. Los nacionalistas proclamaron el cese del fuego despues de tres anos de conversaciones secretas con Londres.

Con este estado de cosas, el proceso de paz esta estancado. En el momento actual, el mantenimiento dela paz depende de la voluntad de los grupos armados de ambas comunidades y de la determinacion de la gente comun, que no desea mas violencia.

"Solo la intervencion estadounidense empujara el proceso de paz", opino el viernes Tim Pat Coogan, autor del nuevo libro "The Troubles", una historia de los ultimos 25 anos, y de un libro anterior sobre el IRA.

Coogan lamento que la semana pasada no se haya otorgado el premio Nobel de la Paz a John Major, pues esto habria aumentado su fuerza y su coraje en estas circunstancias.

El escritor dijo que Major "depende cada vez mas de los unionistas, por lo habria que ser pesimistas en la actual coyuntura, a menos que se produjera la intervencion de una tercera fuerza en la negociacion".

Para Coogan, esa tercera fuerza podria ser "alguien del calibre y la categoria de Anthony Lake (asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca), que viniera con la autoridad del presidente Bill Clinton a sus espaldas".

Uno de los pocos signos politicos positivos, apreciados durante el ultimo ano, ha sido la emergencia de un pensamiento nuevo entre "los duros", como se conoce a los representantes politicos de los paramilitares leales.

Tanto el Partido Democratico del Ulster, que responde a la organizacion paramilitar Asociacion de Defensa del Ulster, como el Partido Unionista Progresista, vinculado a la Fuerza Voluntaria del Ulster, han adoptado una linea mas conciliatoria que los partidos unionistas mayoritarios.

La confianza en que perdurara la vinculacion con Londres es lo que explica su apertura a un cambio politico, y su decision de que la gente de clase obrera como ellos mismos, no arriesgue su vida por el discurso retorico del unionismo mayoritario.

Los partidos leales no tienen aun un mandato electoral, siendo su vinculacion con los paramilitares -que hasta hace un ano mataban catolicos- su unica carta de presentacion.

Resulta paradojico que ahora sean ellos los que usan un lenguaje mas conciliatorio, incluso, que "los hombres de paz" de su propio bando. (FIN/IPS/tra-en/so/fn/arl/ip/95

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