El "caso Contreras", que comenzo siendo el "caso Letelier", se ha convertido para los chilenos en una extensa novela de suspenso por entregas, con un epilogo una vez mas vez postergado por los tribunales.
Cuando todos daban como un hecho que la Corte Suprema ordenaria este martes el traslado inmediato del general retirado Manuel Contreras al penal, el maximo tribunal opto por disponer su encarcelamiento a recien partir del lunes 23 de este mes.
El ex jefe de la Direccion de Inteligencia Nacional (DINA), condenado a siete anos de presidio por el asesinato en 1976 del ex canciller Orlando Letelier, gano asi otras dos semanas de permanencia en el Hospital Naval de Talcahuano, adonde ingreso en junio pasado.
"Ha llegado a su termino este largo proceso judicial", dijo el ministro secretario general de Gobierno, Jose Joaquin Brunner, al emitir el comentario oficial sobre el fallo final de la Corte Suprema.
Segun el ministro y portavoz del presidente Eduardo Frei "no hace dano mayormente a la estabilidad del pais, ni a sus intereses generales, un dia mas o menos" de permanencia de Contreras en el Hospital Naval.
El general se interno en el centro de salud del puerto militar, situado 515 kilometros al sur de Santiago, en una probable maniobra para eludir o postergar la aplicacion de la sentencia de la Corte Suprema del 30 de mayo, que disponia su encarcelamiento inmediato.
Desde el momento mismo en que se dicto este historico fallo contra el primer jefe de los servicios secretos de la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-90), comenzo a escribirse esta suerte de folletin novelesco por entregas semanales.
Los abogados del ex jefe de la DINA presentaron todo tipo de recursos -de casacion, revision, reposicion, proteccion, recusacion, y otros- que familiarizaron a los chilenos con la compleja jerga judicial.
Cuando el camino de los tribunales se mostro incierto, Contreras habria optado, con el apoyo del Ejercito, por buscar refugio medico, internandose en el Hospital Naval de Talcahuano en un operativo en el que participaron hasta helicopteros militares.
Una y otra vez, el diputado socialista Juan Pablo Letelier, hijo del ex canciller asesinado en Washington, denuncio que Contreras se estaba burlando de la justicia y que aceptar su actitud rompia el principio de igualdad ante la ley.
La situacion del ex jerarca adquirio connotaciones mas alla del caso Letelier y del tema de los derechos humanos, para generar una de las mas complejas situaciones politicas para el gobierno de Frei.
Con el fallo condenatorio a Contreras se puso en el centro del debate el conflicto en torno a unos 500 juicios por desapariciones forzadas durante la dictadura, que involucran sobre todo a cuadros del Ejercito.
Pinochet, quien mantiene el comando del ejercito, presiono para que el "caso Contreras" simbolizara una suerte de "punto final" y se cerraran los demas procesos, segun la ley de amnistia que el expidio en 1978.
Frei y la coalicion gobernante de centroizquierda tuvieron que enfrentar las presiones de la oposicion derechista en favor de la tesis del ex dictador, asi como las demandas de justicia y verdad de los familiares de las victimas.
Brunner sostuvo el martes que la condena al ex jefe de la DINA "es un asunto estrictamente judicial, complejo, que se ha prolongado en el tiempo y respecto del cual el gobierno nunca ha actuado con criterio politico".
Sin embargo, los observadores consideran que este caso estuvo en el trasfondo de la propuesta que Frei hizo el 21 de agosto al pais para superar los conflictos pendientes en materia de derechos humanos y democratizacion.
El mandatario planteo una formula para cerrar los juicios, condicionada al hallazgo de los restos de los desaparecidos, junto a otros proyectos de ley sobre la subordinacion militar al poder civil y la reforma de instituciones de caracter autoritario.
Las complejas negociaciones que han tenido lugar desde entonces entre el oficialismo y la oposicion podrian verse facilitadas ahora, una vez que se haya "descomprimido" la tension en torno al ex jefe de la DINA.
El gobierno, sus partidos y los organismos de derechos humanos habrian preferido el encarcelamiento inmediato de Contreras, pero la Corte Suprema acogio prevenciones sobre el estado de salud de este general de 67 anos de edad.
La ministra de Justicia, Soledad Alvear, indico que por razones de seguridad no se revelaran detalles sobre la forma de traslado de Contreras desde Talcahuano al penal de Punta Peuco, construido especialmente para policias y militares.
Alli, Contreras se encontrara el 23 de este mes con el brigadier Pedro Espinoza, quien fuera su segundo en la DINA, condenado a seis anos de carcel por el asesinato de Letelier, cometido el 21 de septiembre de 1976 en Washington.
Alvear senalo que tambien iran a Punta Peuco 18 policias de Carabineros y un agente represivo civil, condenados a diversas penas de presidio por el secuestro y degollamiento en 1985 de tres militantes comunistas. (FIN/IPS/ggr/dm/hd-ip/95