El gobierno musulman de Bosnia- Herzegovina no aceptara ceder territorios a los rebeldes serbobosnios como capitulo del buscado acuerdo de paz, advirtio hoy el canciller Muhamed Sacirbey.
Sacirbey realizo la advertencia en entrevista con IPS, dos dias antes del comienzo en la ciudad estadounidense de Dayton de una nueva ronda de negociaciones entre musulmanes bosnios, serbobosnios y croatas.
El canciller aseguro que su gobierno no entregara a los rebeldes serbobosnios la oriental localidad de Gorazde, declarada bajo proteccion de la Organizacion de Naciones Unidas (ONU) ni el corredor de Posavina.
"Entregar Gorazde significaria formalizar la 'limpieza etnica', y no aceptamos esa posibilidad", dijo Sacirbey.
La expulsion de grupos etnicos de areas ocupadas militarmente ha caracterizado la guerra de Bosnia-Herzegovina, estallada en 1992.
Sacirbey urgio a los representantes de Estados Unidos y la Union Europea en las conversaciones de paz a respaldar la unidad de Bosnia-Herzegovina, mas alla de la prevista creacion dentro de las fronteras de la Republica de una entidad serbia, que ocupara 49 por ciento del territorio total.
La negativa de Bosnia a entregar territorios complica la gestion del equipo negociador de Estados Unidos, encabezado por el secretario auxiliar de Estado Richard Holbrooke, que busca un acuerdo entre Sarajevo y los separatistas mediante la mutua cesion de pequenas areas.
El asunto sera abordado en la ronda de conversaciones que dara comienzo el miercoles en Dayton, una ciudad del estado de Ohio, y sera la tercera desde el 8 de septiembre.
En las dos primeras rondas, que se desarrollaron en Ginebra y Nueva York, Sarajevo y los rebeldes serbios convinieron compartir la Presidencia, el parlamento y el Poder Judicial de la Republica.
En cuanto al futuro mapa del pais, el plan de paz coincide casi exactamente con la actual situacion militar, y adjudica a la federacion croata-musulmana el control de 51 por ciento del territorio y a los serbios el resto.
Los mediadores confiaban en que el gobierno musulman aceptara ceder a los separatistas la ciudad de Gorazde y el corredor de Posavina, que une zonas capturadas por los serbobosnios con Serbia, a cambio del retiro de estos de los alrededores de Sarajevo.
Sacirbey tambien amenazo negarse a negociar con "criminales de guerra", como califica su gobierno a Radovan Karadzic, presidente de la autoproclamada Republica Serbia de Bosnia y al general Ratko Mladic, jefe de las fuerzas rebeldes, aunque finalmente acepto presentarse en Dayton de modo incondicional.
Asi mismo, el gobierno bosnio anuncio que buscara obtener armas de Estados Unidos una vez firmado el pacto de paz. Washington ha dicho que fortalecera la capacidad de defensa de las autoridades de Sarajevo en caso de no lograrse el desarme de todos los bandos enfrentados en la antigua Yugoslavia.
Mientras, la oposicion republicana, mayoritaria en el Congreso de Estados Unidos, resiste el plan del presidente Bill Clinton de destinar 20.000 soldados norteamericanos a la fuerza de paz de 60.000 hombres que la Organizacion del Tratado del Atlantico Norte (OTAN) desplegara en Bosnia-Herzegovina.
Estados Unidos, que procura mantener la iniciativa en el proceso de paz en Bosnia-Herzegovina, investiga la suerte corrida por 8.000 musulmanes desaparecidos que, segun se cree, habrian sido asesinados por los serbobosnios.
Satelites espias registraron la presencia de fosas comunes en torno de Srebrenica, otra area musulmana protegida por la ONU que en julio cayo en poder de fuerzas separatistas.
Miles de musulmanes desaparecieron desde entonces y las versiones circulantes aseguran que fueron rodeados y asesinados por tropas de Mladic.
Sacirbey destaco este lunes que las informaciones sobre esa matanza y de atrocidades en la ciudad de Banja Luka, controlada por los serbobosnios, exigen la intervencion de la ONU y la OTAN.
El portavoz de la ONU, Joe Sills, advirtio que los datos obtenidos parecen confirmar que los pobladores desaparecidos de Srebrenica fueron asesinados. (FIN/IPS/tra-en/fah/yjc/ff/eu ip/95)