Las fuerzas de seguridad rusas continuan su campana represiva contra grupos ambientalista que trabajan en la contaminada region del Artico.
Informes difundidos esta semana en Moscu dieron cuenta que las oficinas de un grupo ambientalista local, en Sverodvinsk, fueron allanadas recientemente por el Servicio Federal de Contrainteligencia (FSB), sucesor del KGB.
"Tememos que esto pueda formar parte de una accion mas amplia de la policia de seguridad en Rusia contra todos los grupos que trabajan sobre problemas nucleares en el norte", declaro Thomas Nielson, del grupo ambientalista noruego Bellona.
El ano pasado Bellona publico un detallado y extenso informe sobre la contaminacion nuclear en el artico ruso, que abarca las bases de submarinos atomicos de la Flota del Norte, como tambien las instalaciones civiles en el puerto artico de Murmansk.
La fundacion esta planeando publicar en breve una version actualizada del informe. Sin embargo, las oficinas de Bellona en Murmansk fueron allanadas por el FSB el 6 de octubre. Todas sus computadoras, equipos de comunicaciones y material escrito fueron confiscados.
El mismo dia, el FSB allano los domicilios de tres miembros de Bellona en Murmansk y tambien uno en San Petesburgo (ex Leningrado). Ademas arresto a otro miembro en el aeropuerto de esa ciudad baltica.
"Hemos estado trabajando en el nuevo informe por mas de seis meses", dijo Nielson, "pero se apoderareon de todos los materiales, incluso aquellos sobre residuos radiactivos y derrames de combustibles".
El momento en que se efectuaron los allanamientos fue juzgado significativo. Tuvieron lugar cuando el canciller ruso Andrei Kozirev se encontraba en Murmansk, tras haber cumplido una visita a Noruega donde firmo un acuerdo sobre mayor intercambio de informaciones en asuntos nucleares.
Esto fue claramente impopular entre algunos sectores militares.
Los allanamientos se produjeron algunas semanas despues que entrara en vigor una disposicion presidencial que puso fin a las inspecciones civiles de instalaciones nucleares.
Luego de cuatro anos de lucha entre el nuevo inspectorado atomico ruso -Gosatomnadzor (GAN)- y el Ministerio de Defensa, los militares finalmente lograron que el GAN no tenga acceso a instalaciones militares nucleares involucradas en armamento atomico y submarinos de propulsion nuclear.
En 1991, el presidente ruso Boris Yeltsin hizo responsable al GAN de la tutela de todas las empresas nucleares y organizaciones, incluidas aquellas del Ministerio de Defensa.
Sus primeras inspecciones comprobaron que existian serios problemas en esas instalaciones, especialmente en el drenaje del combustible nuclear sobrante, asi como el desmantelamiento y reubicacion de buques con propulsion nuclear y submarinos.
GAN se mostro especialmente alarmado por el almacenamiento de combustible nuclear sobrante de las Flotas del Norte y del Pacifico, asi como la falta de contenedores confiables para transportar esos residuos a la planta de reprocesamiento de Mayak, en los Urales.
GAN produjo un informe condenatorio en 1993 sobre las condiciones de las bases de submarinos nucleares en el Artico. Esto dio lugar a que el Ministerio de Defensa le prohibiera el ingreso a cualquier otra instalacion militar.
Yeltsin fue objeto de presion militar cuando estuvo hospitalizado en julio ultimo y emitio el decreto 350 relevando al GAN de cualquier responsabilidad en la salvaguardia del desarrollo, produccion, pruebas, mantenimiento, almacenamiento y disposicion de armas nucleares, asi como como de unidades con propulsion atomica.
Sin embargo, el informe del GAN no fue el unico. El documento publicado por Bellona en 1994 con 17 mapas detallados de las instalaciones nucleares en el norte, fue aun mas condenatorio.
El informe senalo que la peninsula de Kola, en el Artico, tiene la mas alta concentracion de reactores nucleares en el mundo. Ademas, estan pobremente mantenidos y sufren cada vez mas accidentes debido a los problemas financieros que afronta la Flota del Norte.
Por otra parte, los residuos nucleares se estan acumulando rapidamente en unas 10 bases navales no controladas.
Bellona, que actua como asesor extraoficial de la cancilleria noruega sobre la contaminacion atomica en el Artico, no se ha rendido. Ya fue a la oficina local del FSB en Murmansk con un abogado para exigir la devolucion de equipos y materiales escritos.
"Bajo la legislacion rusa, no tienen derecho a confiscar nuestros materiales sin autorizacion judicial", declaro Nielson.
El miercoles, los miembros de Bellona cruzaron la fontera rusa con nuevos equipos de comunicaciones y computadoras para su oficina de Murmansk. Todos sus miembros detenidos ya fueron liberados luego de un interrogatorio de varias horas.
No obstante que la situacion politica es complicada debido a las proximas elecciones parlamentarias, ni el Ministerio de Defensa ni su homologo de Energia Atomica estan dispuestos a aceptar nuevas revelaciones sobre contaminacion atomica en sus instalaciones, si bien Bellona cuenta con cierto apoyo en la jerarquia rusa, incluyendo la cancilleria y el GAN.
"Las relaciones tambien han sido muy buenas con los marinos de la Flota Norte", aseguro Nielson. (FIN/IPS/tra-en/ai/fn/ego/en)