Los apagones que sufre Ecuador desde hace dos meses han cambiado la vida de su gente, sus horarios, sus costumbres y hasta el rostro de las ciudades, desiertas durante las horas de oscuridad.
Muchos negocios cerraron sus puertas "por lo menos hasta que se regularice el suministro de electricidad (…) porque sin luz no se puede hacer nada", comento Julio Carrion, propietario de una cerrajeria en una de las principales calles del centro historico de la capital.
Carrion, al igual que muchos otros comercianetes y pequenos empresarios del pais, suspendio sus servicios por la falta de energia: "la gente no sale en horas de apagon, a pesar de que algunos han instalado pequenas plantas de electricidad", lamento.
Si bien la policia insiste en que se redoblaron los dispositivos de seguridad, periodicos de Quito y Guayaquil senalan el aumento de delitos en las areas donde no hay luz, lo que habria llevado a la poblacion a no salir a la calle durante los apagones.
La industria heladera, en Guayaquil, habria sufrido una disminucion de 40 por ciento en la produccion de helados por falta de electricidad. Sin embargo, la mayor perdida, segun los empresarios, esta en la venta del producto al publico, que ha bajado 70 por ciento.
Negocios como el de revelado fotografico registraron bajas hasta de 65 por ciento, cifra curiosamente comparable a la de ciertos negociantes de productos de mar.
"Al principio se perdieron muchos kilos de comida porque se pudrieron y ahora los clientes no vienen como antes", segun Diego Palacios, dueno de una pescaderia.
Uno de los pocos negocios con perspectivas en este periodo de crisis energetica es la fabricacion de velas. La produccion de la fabrica Tungurahua, de la capital, aumento en un 30 por ciento y muchas veces no logra satisfacer la demanda de los grandes centros comerciales.
Estas situaciones dan una idea de las consecuencias economicas en los sectores industriales del pais, aun no evaluadas, tras dos meses de continuos cortes de energia electrica.
Por otro lado, en los barrios del sur de la capital, unas 3.000 personas sufrieron la interrupcion del servicio de agua, ya que las estaciones de bombeo no logran hacerla llegar hasta esas zonas.
Mujeres y hombres caminan con cubetas sobre los hombros, transportando el preciado liquido. "Tenemos que caminar unos dos mil metros para llenar nuestras cubetas de agua", comento un habitante del lugar.
No hay agua desde hace cuatro dias y existe preocupacion porque se prolongue esta situacion que podria desencadenar brotes de epidemias dificiles de controlar, segun voceros del ministerio de Salud.
Mientras tanto, los cortes de luz continuan aumentando. En algunas ciudades han durado hasta 12 horas. La Empresa Electrica del Ecuador (EMELEC), anuncio que la crisis no se superara sino dentro de cuatro meses, ya que en octubre comienza la epoca de sequia.
Los dirigentes de EMELEC sostienen que la reduccion del embalse en la central hidroelectrica Paute, que aporta el 70 por ciento de energia al pais, se debe a una sequia "no prevista". (FIN/IPS/mg/dm/en-dv/95
