La ejecutiva Comision Europea aprobo hoy una nueva politica para China en las areas de comercio, politica, cultura y derechos humanos, pero activistas de CIOSL sostienen que la misma ignora los derechos de los trabajadores.
El comisario de Comercio Exterior de la Union Europea (UE), Leon Brittan, dijo que el objetivo de la nueva politica es facilitar a la industria europea el acceso a la economia china e impulsar a Beijing en sus reformas mediante "presiones publicas, discusiones formales privadas y cooperacion practica".
China se encuentra en un punto de inflexion en sus relaciones con el mundo exterior y su poderio economico, politico y militar adquiere un papel cada vez mayor en los asuntos internacionales, lo cual es algo "positivo", dijo este miercoles Brittan.
La UE respalda el interes de China en integrarse a la Organizacion Mundial del Comercio (OMC), un tema debatido en Bruselas, Beijing y Washington.
La politica de la UE hacia China fue presentada por Brittan en un informe que sera considerado por los cancilleres del bloque europeo este mes.
Aunque el comercio bilateral entre China y la UE aumento 14 veces desde el inicio de las reformas economicas chinas en la decada de 1980 y en 1994 represento 46.550 millones de dolares, la participacion europea en la inversion extranjera directa en el pais asiatico continua siendo muy baja, se indico en el informe.
Sobre los derechos humanos, el informe sugiere que la UE brinde fondos al sistema legal y judicial de China y mantenga un dialogo directo sobre casos especificos de violaciones de los derechos basicos, que "siguen siendo parte de la vida cotidiana".
Pero la Confederacion Internacional de Organizaciones Sindicales Libres (CIOSL) esperaba una postura mas firme de la UE respecto de las practicas en campos de trabajo y "areas economicas especiales" que explotan a presos y trabajadores en la fabricacion de productos baratos para el mercado europeo.
Un vocero de CIOSL dijo que en las ultimas semanas su organizacion y la Confederacion de Uniones Sindicales Europeas presionaron intensamente a Brittan para que el informe incluyera por ejemplo un llamado a que Beijing respete las convenciones de la Organizacion Internacional del Trabajo (OIT).
Otro reclamo de las organizaciones de trabajadores es que se especifiquen las relaciones entre el Sistema Generalizado de Preferencias (SGP) de la UE, que ofrece reducciones arancelarias a productos manufacturados y agricolas de paises en desarrollo, incluyendo China.
Desde enero de 1995, las concesiones del SGP deben ser suspendidas si los bienes son producidos con trabajo forzado y a partir de 1998 los beneficiarios deberan ser penalizados si no garantizan la libertad de asociacion. (FIN/IPS/tra-en/dp/cpg/lp/dv-if/95
