El juez mexicano Abraham Polo Uscanga, asesinado el martes, dejo un recado postumo en el que responsabiliza de su posible muerte al presidente de un tribunal superior, quien lo habria presionado para cumplir ordenes oficiales.
La informacion fue proporcionada por portavoces de la Procuraduria de Justicia de la capital, quienes indicaron que para aclarar el crimen llamaran a declarar al magistrado mencionado en la nota, a un ex secretario de Estado y un lider sindical, entre otras personalidades.
Las fuentes senalaron que un funcionario de la Procuraduria recibio del juez asesinado una carta escrita dos semanas antes de morir en la que culpa al presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, Saturnino Aguero, de su posible asesinato y lo acusa de continuos hostigamientos y amenazas.
Polo Uscanga denuncio a la prensa antes de morir que el presidente del Tribunal le dijo que se "atenga a las consecuencias" por no avalar el encarcelamiento de los lideres sindicales de la empresa de tranporte capitalino Ruta 100, cerrada por las autoridades en abril.
El magistrado, quien se Habia reunido con representantes de la firma de transporte para apoyar su defensa, sostenia que el Ejecutivo presionaba periodicamente a los jueces para cumplir sus ordenes.
Para aclarar el crimen fueron citados tambien los principales responsables del cierre de la empresa, el ex secretario de Hacienda, Pedro Aspe, y el lider del sindicato de Ruta 100, Ricardo Barco.
Polo Uscanga, quien habia renunciado a su cargo en abril, acuso a Aspe de presionar al presidente del Tribunal para rectificar un auto de libertad en un proceso legal que se seguia contra un grupo empresarial.
Segun una encuesta realizada por el periodico Reforma, 80 por ciento de los capitalinos no cree que las autoridades resuelvan el asesinato del magistrado, el tercero de una figura publica en los ultimos dos anos.
En 1993 fue ultimado el cardenal Juan Jesus Posadas Ocampo y en 1994 el candidato presidencial del gobernante Partido Revolucionario Institucional Luis Colosio y el secretario de esa agrupacion, Francisco Ruiz Massieu.
El miercoles, cientos de personas, entre los que habia politicos de oposicion y trabajadores de la empresa Ruta 100, asistieron al sepelio de Polo Uscanga y corearon consignas contra el gobierno y exigiendo justicia.
Ruta 100, empresa que daba un servicio de transporte a bajo costo a los capitalinos, fue cerrada por las autoridades argumentando que habia quebrado y que sus lideres sindicales eran corruptos y desviaban fondos para financiar al Ejercito Zapatista de Liberacion Nacional del estado de Chiapas.
La firma, que recibia subvenciones oficiales, se habia transformado en una fuerza de oposicion que periodicamente orquestaba protestas contra el gobierno. (FIN/IPS/dc/dg/ip/95)