El movimiento contra la pena de muerte aun demuestra vigor en los paises del Caribe, aunque debe enfrentar una extendida demanda de endurecimiento de los castigos para contener el deterioro de la seguridad publica.
Los recursos legales y la resistencia de los activistas de derechos humanos ha frustrado en muchos casos el deseo de las autoridades de ejecutar cuanto antes a los condenados a muerte.
La campana contra la pena capital surgio en 1993, respaldada por la decision del Consejo Privado de Londres, la suprema corte de justicia de muchas ex colonias britanicas, de conmutar por cadena perpetua las sentencias a muerte de reclusos que llevaban un minimo de cinco anos en prision.
Protestas internacionales lograron en la decada de 1980 la interrupcion de las ejecuciones en el Caribe, pero el alto indice de criminalidad inclina ahora a grandes sectores de opinion a favor de la pena de muerte.
Unos 140 asesinatos se registraron el ultimo ano en Trinidad y Tobago, que cuenta con 1,2 millones de habitantes, mientras en Jamaica, los homicidios fueron 690 en 1994, 653 en 1993 y 316 en lo que va de 1995, segun la policia.
Los 250.000 habitantes de Barbados, un territorio relativamente libre de delincuencia, se horrorizaron en el primer trimestre de este ano ante los cinco asesinatos cometidos en el periodo.
El gobierno de San Vicente, encabezado por John Mitchell, hizo caso omiso en febrero de los pedidos de clemencia de los activistas y ejecuto a Douglas Hamlet, Franklin Thomas y David Collins.
Derechos del Caribe, el organismo regional de derechos humanos, expresaba su afliccion mientras amplios sectores de poblacion aplaudian al gobierno vicentino.
Segun Achmed Ghany, un sociologo residente en Trinidad y Tobago, donde 69 reclusos aguardan la ejecucion de su sentencia a muerte, "San Vicente esta en el buen camino".
El gobierno de Trinidad y Tobago ejecuto hace casi un ano a Glen Ashby mientras la corte de apelaciones local consideraba una solicitud de aplazamiento de la sentencia.
Ashby fue ahorcado solo minutos antes de que el Consejo Privado de Londres resolviera suspender la ejecucion, y el episodio fue ampliamente denunciado por Amnistia Internacional y defensores de derechos humanos del area del Caribe.
La ejecucion de Ashby fue la primera en Trinidad y Tobago en 15 anos. La moratoria de hecho se remonta en Jamaica a 1988, y en Bahamas, a 1984.
Maurice King, ex fiscal general de Barbados, advirtio que "si el Estado legitima la violencia, no tendra autoridad moral para impedir que otros sean violentos".
Flo O'Connor, directora del Consejo de Derechos Humanos de Jamaica, insto a los gobiernos del Caribe a seguir el ejemplo de Sudafrica, que hace poco mas de una semana elimino la pena de muerte de su legislacion.
La abolicion de la pena capital en Sudafrica "revela una valorizacion de la vida de los ciudadanos que muchos otros gobiernos deberian tener en cuenta", senalo O'Connor. (FIN/IPS/tra-en/da/ml-ff/ca hd/95