La caza furtiva, la captura comercial y la degradacion que viene sufriendo la flora panamena a consecuencia de la tala de arboles y el uso de pesticidas, han colocado a 81 especies de la fauna autoctona al borde de la extincion.
Panama ostenta el privilegio de contar con 929 especies de aves, 227 de mamiferos, 226 de reptiles y 170 de anfibios, asi como 122 especies de aves migratorias que al cabo del ano se estacionan temporalmente en el pais. Cincuenta y siete de ellas son endemicas, es decir que solo existen en el pais.
Sin embargo, una reciente denuncia presentada por la no gubernamental Asociacion para la Conservacion de la Naturaleza (ANCON) advirtio que 38 especies de aves, 33 de mamiferos y 10 de anfibios y reptiles estan en vias de desaparecer a causa de la caza, la comercializacion y la destruccion de su habitat.
Sitios como el valle de Tonosi, en la central provincia de Los Santos, donde residia hasta hace pocos anos una de las mayores concentraciones de guacamayos del pais, ha perdido mas de 95 por ciento de sus bosques debido a la tala y la quema de arboles para habilitar potreros y campos de labranza.
Situaciones similares ocurren en la oriental provincia de Darien y en la cuenca hidrografica del canal de Panama, donde cada ano se talan o queman entre 40.000 y 50.000 hectareas de bosques para esos mismos fines.
De la desaparicion forzada no escapan los arboles y plantas medicinales, segun indico el experto del Instituto Nacional de Recursos Naturales Renovables (INRENARE) Aurelio Tejeira.
Explico que solo en la region central del pais, que incluye a Los Santos y las provincias de Herrera y Cocle se han perdido alrededor de cinco especies de arboles y que existen otros que estan en grave peligro.
La tala comercial y la quema indiscriminada de arboles para pastoreo y explotaciones agricolas provocaron la perdida de mas de la tercera parte de las 4,2 millones de hectareas de bosques que poseia Panama a finales de la decada de 1940.
La actual tasa de deforestacion varia de 70.000 a 90.000 hectareas anuales.
Pero en esta suerte de guerra no declarada entre el hombre y la naturaleza, los que llevan la peor parte son las aves, los mamiferos, los reptiles y los anfibios, senalo el director regional de ANCON para las provincias de Panama y Colon, Antonio Telesca.
Telesca esta a cargo de un programa desarrollado por ANCON para rescatar a los animales silvestres abandonados en las calles de Panama y Colon porr sus propietarios.
Cada mes en estos dos centros poblados ANCON recoge cerca de 50 animales abandonados, que, luego de ser alimentados y curados, pasan por un proceso de readaptacion al bosque hasta que son reintegrados a su habitat natural.
La lista de animales y aves abandonadas y rescatadas incluye iguanas, tortugas de todas las especies, osos perezosos, monos, ardillas, boas y una gran variedad de aves.
A pesar de que la caza deportiva y la captura con fines comerciales estan prohibidas, en las carreteras y ferias del interior del pais estas especies se venden publicamente.
Telesca explico que lo que ocurre generalmente con estos animales "es que cuando el dueno se cansa de la crianza de sus mascotas silvestres lo primero que piensa es en soltarlas".
Tras indicar que no existe una "cultura ambiental" en la poblacion, el activista senalo que las personas que sueltan a sus mascotas desconocen que a esos animales, ya habituados a los cuidados humanos, "se los condena a la muerte porque su instinto no es suficiente para subsistir".
Las autoridades no escapan a la criticas por su indolencia o falta de recursos para hacer cumplir las leyes existentes.
Roberto, un cazador furtivo que junto a otros 15 panamenos se ha agrupado en un club de caza deportiva, testimonio a la prensa local que nunca se encontro con un guardabosque o una autoridad que le impidiera realizar esa ilegal actividad.
Tambien cuestiono que, por un lado se prohiba la caza con fines deportivos y por otra se ofrezcan armas y municiones en el comercio local y se expidan permisos oficiales para poseer armas de caceria sin ninguna restriccion.
Mientras tanto, los expertos advierten que de proseguir el actual ritmo de deforestacion y destruccion del habitat de la rica y variada fauna autoctona, en 20 anos Panama se convertira en un desierto inhabitable para los animales y tambien para la especie humana. (FIN/IPS/sh/dg/en/95)