La guerra de denuncias y amenazas entre el oficialismo mexicano y el ex subprocurador Mario Ruiz Massieu, quien tuvo a su cargo la investigacion del asesinato de su hermano y secretario general del partido de gobierno, Jose Francisco Ruiz Massieu, tuvo hoy un nuevo capitulo.
Mario Ruiz Massieu, quien renuncio como subprocurador y se alejo tambien del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en el poder desde su origen en 1929, acusa a la cupula partidaria y del "sistema" de encubrir a los autores intelectuales del homicidio, ocurrido el 28 de septiembre.
Senala que el crimen de su hermano y el entorpecimiento de las investigaciones "marcan la corrupcion, descomposicion y ocaso de un regimen que no soporta la prueba de una real democratizacion".
A juicio de Mario Ruiz Massieu el hecho fue politico y sus responsables son un grupo de influencia o corriente de caracter interno del oficialismo que esta siendo protegido desde el poder.
"Soy un candidato ideal a ser eliminado, porque se mucho mas y solo hice publico un 20 por ciento de las cosas que conozco", declaro este viernes a la prensa el ex subprocurador.
Al presentar su renuncia el miercoles, Ruiz Massieu afirmo que "pudo mas el poder de la clase politica priista que la voluntad de verdad y justicia del mandatario saliente, Carlos Salinas".
Dijo que el secretario (ministro) de Agricultura, Carlos Hank, lider del Grupo de Atlacomulco (factor de poder interno del PRI), "podria haber influido" para frenar la decision presidencial de que se esclareciera el asesinato de Jose Francisco Ruiz Massieu.
Expreso esperanza, pero tambien poca fe, en que el presidente electo, Ernesto Zedillo, que asume el 1 de diciembre, lleve hasta el fin la indagacion que el concluyo en su "primera fase".
Sostuvo que la investigacion llego hasta el punto de que su exito depende ya de "decisiones politicas" que "rebasaban su nivel de responsabilidad", y sin las cuales no podria concluirse.
"Los demonios estan sueltos y han triunfado", exclamo dramaticamente ante toda la prensa nacional y mundial reunida en el auditorio del ministerio de justicia.
Segun su denuncia, el procurador Humberto Benitez Trevino (ministro de Justicia), el presidente del PRI, Ignacio Pichardo Pagaza, y su secretaria general (sustituta de la victima), Maria de los Angeles Moreno, obstaculizaron la indagacion del caso y avalaron un pedido de licencia falso de quien ordeno el crimen.
El diputado priista Manuel Munoz Rocha -a quien el ejecutor material del asesinato y 14 de sus complices, todos detenidos, senalaron coincidentemente como autor intelectual del homicidio- desaparecio del ambito publico horas despues del hecho.
Una semana despues recibio licencia de la Camara y sigue profugo, aunque algunas versiones aducen que fue eliminado para evitar que suministre informacion comprometedora sobre los verdaderos responsables intelectuales del crimen.
Peritajes contrapuestos encargados por ambas partes aseguran respectivamente la autenticidad o la falsificacion (por el metodo de calco) de la firma de Munoz Rocha en la solicitud de licencia.
Tanto el PRI como la Procuraduria, Pichardo Pagaza, Moreno y Benitez Trevino iniciaron acciones para enjuiciar por difamacion y calumnias a Mario Ruiz Massieu, a quien acusan de hacer graves imputaciones injuriosas sin prueba alguna.
El ex subprocurador senalo que las pruebas estan en el expediente de su investigacion, que se encuentra en oficinas de la misma Procuraduria y que el prometio entregar ante notario publico debido a que desconfia de las actuales autoridades.
La Procuraduria dijo que el ayudante de Mario Ruiz Massieu y titular de la visitaduria "donde se halla el expediente con las supuestas pruebas", Jorge Stergios, se nego a entregarlo a un grupo de funcionarios acompanado por tres notarios publicos.
Ambas vertientes opositoras, el derechista Partido Accion Nacional (PAN) y el centroizquierdista Partido de la Revolucion Democratica (PRD) demandaron la destitucion del procurador, su enjuiciamiento politico por el parlamento y la continuidad en el cargo y en el caso del ex subprocurador.
En cambio la cupula, los bloques legislativos y todo el aparato dirigente del PRI cerraron filas y atacaron duramente a Mario Ruiz Massieu, acusandolo de irresponsable y de buscar protagonismo politico sobre la base de calumnias sin base alguna.
El presidente electo Zedillo adujo no conocer directamente el caso y prometio estudiarlo apenas asuma para llevar a buen fin la investigacion, "porque somos los mas interesados en que se aclare la verdad de lo ocurrido".
Zedillo admitio que "nuestro estado de derecho deja mucho que desear", por lo que impulsara "una gran reforma de la justicia" y luchara contra el negocio de las drogas.
Dijo que apoyara las investigaciones a fondo de los homicidios de Ruiz Massieu y su antecesor como candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio, baleado el 23 de marzo en la ciudad de Tijuana, fronteriza con Estados Unidos.
En el caso Colosio, como en el de Ruiz Massieu, esta preso, confeso y condenado el autor material, pero nada se ha establecido acerca de los eventuales autores intelectuales.
Carlos Castillo Peraza, presidente del PAN, insto a las autoridades a poner orden en el caso Ruiz Massieu para esclarecer cabalmente sus moviles y autores, caiga quien caiga.
Cuauhtemoc Cardenas, creador y lider del PRD, denuncio que "la fuerza del poder publico protege a quien se deberia investigar". El titular del PRD, Porfirio Munoz Ledo, dijo que "hay un apoyo arriba de Pichardo que mueve los hilos capaces de impedir la solucion a fondo del caso Ruiz Massieu". (FIN/IPS/emv/mso/np/94). – – –