(Artes y Espectaculos) ECUADOR: Betancurt pinta la magia andina

Cuando era nino atrapaba con sencillos trazos las imagenes de cine que proyectaban en las paredes de su pueblo, hoy, el pintor ecuatoriano Miguel Betancurt trasciende fuera de su pais con obras abstractas que conjugan sus vivencias en Europa con la vitalidad del mundo andino.

Betancurt, quien este jueves 10 inaugura una muestra individual en Washington, es un pintor de 36 anos que viene mostrandose como uno de las artistas ecuatorianos de mayor trascendencia internacional luego de los de la generacion del maestro Oswaldo Guayasamin, de 75 anos.

A diferencia de Guayasamin, Bentacurt no pinta el sufrimiento humano ni intenta hacer denuncia social con su arte. "Yo busco recuperar la magia y los suenos de lo andino", dice tras autocalificar su obra de "luminosa y fresca".

"Soy de otra generacion, no es que desconozco el sufrimiento y la injusticia sino que tambien existe la magia y el sueno, el espacio para volar e ir a otros niveles", senala.

El joven pintor cuenta que dio sus primeros pasos en el arte cuando de nino asistia a funciones de cine en su pueblo natal, estas se realizaban las noches, al aire libre, sobre las paredes blancas de cualquier casa.

"Las imagenes eran magicas. Cuando terminaba la funcion, dibujaba sobre las paredes lo que habia visto en las peliculas", explica.

Betancurt pinta en oleo y acuarela, sobre cartulina y lienzo pero tambien en tela, madera, ademas de hacer escultura en ceramica.

La exposicion en la capital norteamericana, la segunda de ese pintor en esa ciudad desde 1988, se realiza en la Moscoso Gallery. Se trata de una serie de 35 acrilicos denominada "Arborescencias", que en forma abstracta y en colores intensos recrea parte de la naturaleza de Ecuador.

"En mi obra hay yuxtaposicion de colores, pues es precisamente la diversidad y el contraste lo que caracteriza nuestro mundo andino, donde se conjuga lo occidental, lo indigena, lo magico, lo practico, los intensos matices de amaneceres y atardeceres", expresa.

Rosados, azules, rojos, verdes, amarillos y negros son los colores que mas destacan en su obra, donde raices, tallos y hojas se confunden en una armonia que demuestra temperamento y transparencia, coniciden en senalar varios criticos de arte locales.

El pintor, quien viene realizando exposiciones desde 1976, ha sido premiado por la Fundacion Pollock Krasner de Nueva York y por el Museo de Arte Contemporaneo de Santiago de Chile, fuera de varios galardones obtenidos en su pais.

Solo en 1993, Betancurt expuso en Nueva York, Viena, Roma, Amsterdam, Londres, Bruselas y Venecia. En anos anteriores lo hizo en Santiago de Chile, Washington, Londres, Mexico y Caracas.

El critico William Jeffett opina que las obras del pintor ecuatoriano responden a precendentes artisticos de Pablo Picasso a los que se suma "una reaccion personal frente a los paisajes tropicales, escencialmente un sincretismo artistico de estilos conflictivos".

"Mediante el acto de pintar, Betancurt busca interrogar su propia identidad e intenta recrear la pintura como un vehiculo para imaginar una sensibilidad andina", sostiene el experto, quien labora en el centro Sainsbury para las Artes Visuales de la Universidad de East Anglia, en el Reino Unido.

Betancurt "deriva el discurso prevaleciente del modernismo mediante una exploracion de la subjetividad", anade Jeffett, quien es ademas critico independiente de arte contemporaneo en Espana.

"En mi arte yo busco como utopia recuperar los suenos y la magia, esos mundos que nos pertenecen a los andinos tanto como el sufrimiento y la pobreza", expresa el artista.

Al referirse a la obra del pintor ecuatoriano, un catalogo de la Bienal de Pintura de Venecia senala que "dos ideales superiores se combinan en su produccion, el uno mistico y el otro ecologico. Por lo primero acude a la cultura europea, por lo segundo se dirige a las imagenes de la vegetacion tropical, de su propia cultura".

Betancurt sostiene que en su inclinacion por el arte tuvo mucho que ver su padre "un pequeno agricultor que daba vida a las plantas".

El pintor vivio sus primeros anos en Cumbaya, un pueblo de unos 25.000 habitantes ubicado a 10 kilometros de Quito, estudio en colegios de la capital y en Estados Unidos, luego siguio literatura en una universidad local y finalmente hizo un postgrado en el Slade School of Fine Art, de la Universidad de Londres.

"Los viajes me sirvieron para observar la obra de los grandes pintores y poderla integrar y recrear con el mundo andino al que pertenezco", manifiesta Betancurt.

Actualmente el pintor mantiene varios cuadros en paises de Europa, donde periodicamente se vienen exhibiendo en galerias.

"El arte de Miguel Betancurt representa un cuestionamiento de la pintura como lenguaje dominante del arte moderno. Aunque retiene los medios establecidos de la pintura y la acuarela, evita las estrategias mas de moda tipicas del post modernismo", opina el critico Jeffett. (FIN/IPS/dc/ae/94) (Sigue el Servicio)

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