ESTADOS UNIDOS: Obama convence a todos

El discurso de asunción del nuevo presidente de Estados Unidos, Barack Obama, fue en muchos sentidos una repetición de lo que había dicho en su campaña, atendiendo la preocupación de los diferentes sectores políticos para obtener respeto de todos, pero dejando muchas dudas sobre sus efectos prácticos.

Crédito: Sitio oficial de Barack Obama
Crédito: Sitio oficial de Barack Obama
Este miércoles, las reacciones en los medios al discurso eran variadas, pero en su mayoría positivas. El consenso general tanto en la izquierda como en la derecha es que el discurso estuvo un poco por debajo de las expectativas, pero fue maduro y sólido en contenido.

Los elogios que recibió tanto de liberales como conservadores fue una evidencia de la continua habilidad de Obama para darle a cada uno de sus oyentes algo para que puedan seguir soñando. Por eso, quizás no es sorpresa que la mayoría de los que criticaron su alocución se limitaron a decir que era vaga e inconsistente.

Como candidato presidencial, así como durante el periodo de transición, el discurso de Obama subrayaba los temas que iban más allá de los partidos y apelaban a la unidad nacional. Su famosa afirmación, durante la Convención Demócrata de 2004, de que "no existe un Estados Unidos liberal y un Estados Unidos conservador, sino que existe Estados Unidos de América" es un típico ejemplo.

Pero las reales posiciones de Obama son más difíciles de discernir. Sus partidarios de izquierda y sus críticos conservadores temen que su retórica conciliatoria sea el disfraz de una sólida agenda liberal. Pero, en los últimos meses, el nuevo presidente estadounidense se ha mostrado como un pragmático de centro.
[related_articles]
El veredicto final, todos coinciden, se podrá dar recién después de que Obama comience a gobernar.

En este sentido, el discurso inaugural fue una decepción para los que esperaban una clara señal sobre qué dirección pretende seguir su administración. El nuevo presidente continuó con su hábito de ofrecer una retórica que todos los sectores podrían tomarla como propia.

Como resultado, la reacción fue en gran medida positiva en todo el espectro político.

Muchos encontraron el discurso un tanto decepcionante como obra de retórica: a pesar de la reputación de Obama de ser uno de los grandes oradores de su generación, hubo líneas que eran demasiado parecidas a famosas palabras de los ex presidentes Abraham Lincoln (1861-1865) y Franklin Delano Roosevelt (1933-1945).

De todas formas, por su contenido, la mayoría de los comentadores lo elogiaron. El periódico The New York Times señaló en su editorial que el discurso ofreció "la claridad y el respeto del que todos los estadounidenses estaban hambrientos", mientras que el conservador The Wall Street Journal dijo que Obama "aprovechó el momento con un discurso inaugural que invocó los propósitos históricos de Estados Unidos y el optimismo".

Muchos prominentes columnistas le tomaron la palabra cuando dijo querer trascender "trasnochados argumentos políticos". El columnista David Ignatius, del diario centrista The Washington Post, escribió: El discurso "nos mostró, una vez más, que el nuevo presidente realmente habla en serio cuando dice que quiere crear un nuevo tipo de política para Estados Unidos más allá de los partidos".

La ex redactora de los discursos de Ronald Reagan (1981-1989), Peggy Noonan, escribió en The Wall Street Journal que las palabras de Obama constituyeron un "serio y soberbio discurso" que capturó el centro político. En temas de política exterior y defensa, el nuevo presidente ofreció un discurso igualmente agradable para "halcones" (ala más belicista) y "palomas" (ala más moderada), así como para realistas e idealistas. Su afirmación de que rechazaba "la falsa opción entre seguridad e ideales" fue una de las líneas más citadas del discurso inaugural. La mayoría vieron en su alocución un fuerte repudio a las políticas de su predecesor, George W. Bush.

Pero las declaraciones de Obama en ese sentido no fueron tan diferentes a las hechas por el propio Bush, cuatro años antes de su segundo discurso de asunción, cuando dijo: "Los intereses vitales de Estados Unidos y nuestras más profundas convicciones ahora son una".

Obama claramente se resistió a repudiar en forma explícita la ambiciosa visión internacional de Bush. En la mayor parte del discurso, simplemente prometió actuar en forma más prudente, en concierto con aliados y sin el recurso constante de la fuerza, como lo hizo su antecesor.

Mientras, el nuevo mandatario granjeó respaldo de los halcones al prometer vencer a los terroristas. "No nos podrán superar y los derrotaremos", afirmó.

"Para muchos conservadores, ésta fue la frase que constituyó la firma del discurso inaugural de Barack Obama", escribió Thomas Donnely en el conservador Weekly Standard.

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe