Agricultores cavan fosas circulares en las tierras áridas del Sahel, en el centro-oeste de África, degradadas por la desertificación, para tratar de recuperarlas con fines agrícolas. Recuperar 10 por ciento de los suelos agrícolas degradados permitiría incrementar la alimentación de 154 millones de personas, más los beneficios para los agricultores y el medio ambiente, destaca un nuevo estudio de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. Imagen: FAO
