Las sanciones de Estados Unidos contra Venezuela no impiden que lujosos establecimientos comerciales en Caracas y otras ciudades venezolanas vendan productos estadounidenses y europeos para el consumo de una minoría con amplio acceso a divisas, beneficiados por la liberación impositiva para su ingreso al país. Mientras, tres cuartas partes de la población están sumidas en la pobreza. Foto: Humberto Márquez / IPS