Un operativo militar en Moju, en la Amazonia Oriental, incautó 175 metros cúbicos de madera extraída ilegalmente en una propiedad de 1200 hectáreas. Es una actividad que contribuye a la deforestación amazónica, que creció desde 2015, especialmente en los dos últimos años, durante el gobierno de Jair Bolsonaro. Su ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, defiende los madereros y mineros, aunque sea ilegal. Fotos: Alex Ribeiro/Ag.Pará-Fotos Públicas

Relacionadas