Los conflictos han desarraigado a millones de personas en varios países africanos, las que se encuentran en situaciones de gran vulnerabilidad, y llevó a una organización de derechos humanos a reclamar que no se las olvide.
El Consejo Noruego para Refugiados (NRC) realizó el reclamo al publicar su lista anual de crisis de desplazamientos más desatendidas del mundo.
“Es un triste patrón que vemos otra vez, que las crisis en el continente africano rara vez ocupan los titulares de la prensa o un lugar en la agenda de la política exterior hasta que ya es muy tarde”, observó el secretario general del NRC, Jan Egeland.
En el informe de este, la organización concluye que seis de los 10 conflictos más desatendidos se desarrollan en África.
La República Democrática del Congo, donde años de guerra civil desplazaron a más de cinco millones de personas, está al inicio de la lista. Y Sudán del Sur, República Centroafricana, Burundi y Etiopía están entre los cinco primeros.
¿Por qué esos conflictos no llaman la atención?
Entre los principales motivos de preocupación se destaca la falta de voluntad política y diplomática.
“Nosotros (Occidente) somos buenos haciendo la vista gorda cuando no tenemos un gran interés geopolítico”, explicó la portavoz del NRC, Tiril Skarstein, en diálogo con IPS.
“Los países de la lista se consideran menos importantes desde el punto de vista estratégico, y por eso no hay un interés internacional en encontrar soluciones”, apuntó.
Skarstein explicó que en algunos países, sucede lo contrario, hay muchos actores con intereses políticos encontrados que participan en los conflictos, como sucede en Yemen y Palestina, donde los réditos políticos se ponen por delante de la vida de las personas.
La falta de voluntad política para trabajar en la búsqueda de una solución es uno de los tres criterios para medir las crisis e incluirlas en la lista.
Los medios dan vuelta la cara
Según el NRC, la difícil situación de los refugiados africanos se borra de forma consistente de la “conciencia de Occidente” porque los medios occidentales no muestran sus penurias ni aparecen en las noticias.
Y si aparecen, no las cubren, por cierto, como a otras crisis humanitarias.
Skarstein comparó la situación de Siria y de República Democrática del Congo, cada uno con alrededor de 13 millones de personas necesitadas de asistencia humanitaria.
“Muchas personas no saben eso. ¿Por qué? porque ambos casos tuvieron una exposición internacional totalmente diferente”, explicó a IPS.
Como muchos de los refugiados de Siria huyeron del régimen de Bashar al Assad hacia Europa, en Occidente, muchas personas tuvieron que “afrontar y asumir la difícil situación”, añadió.
“Vemos a esas personas literalmente llegar a nuestra puerta. En los medios, sus historias aparecen en las crónicas, en la televisión, en Internet y en las redes sociales. Cuando la gente puede ver a otros y conoce su situación, suele importarles más y hace que actúen”, apuntó.
En cambio, en el caso del conflicto de República Democrática del Congo y de otros países africanos es común que las personas huyan hacia las naciones vecinas.
“No llegan a las playas turísticas; cruzar de una frontera africana a otra no genera el mismo nivel de exposición”, explicó Skarstein.
Menos dinero, más problemas
La falta de voluntad política y de atención de los medios hace que los recursos humanitarios no lleguen a muchas de las crisis africanas.
“Las crisis que no concentran mucha atención y rara vez se mencionan en los medios, tampoco suelen recibir apoyo económico para cubrir las graves necesidades humanitarias”, explicó.[related_articles]
La República Democrática del Congo es la segunda de las crisis más grandes que menos recursos económicos recibe, pues reunió menos de la mitad de los 812 millones de dólares solicitados para hacer frente a la situación.
Otro problema es el “cansancio de los donantes”, un fenómeno en el que cuanto más dura un conflicto, más difícil es reunir fondos.
“Hay conflictos que se extienden durante años, a veces hasta décadas, y hay gente que piensa que es un caso imposible, otra vez. Necesitamos luchar contra eso”, indicó.
¿Qué puede sacar a esos conflictos africanos de la lista de crisis descuidadas?
El NRC señala que lo más importante es que los donantes ofrezcan asistencia en función de las necesidades humanitarias y no políticas.
La organización de derechos humanos también subrayó el papel de los medio a la hora de llamar la atención sobre los desastres humanitarios desatendidos.
“La exposición es fundamental, que se oiga y se escuche a la gente también es clave. Cuanto más hablemos sobre esas crisis y más las veamos, más podrá hacerse”, señaló Skarstein.
Y esa lista debe oficiar de recordatorio para todos.
“Solo porque no veamos el sufrimiento de las personas, no significa que sea menos real; lo importante es que no nos exonera de nuestra responsabilidad de actuar”, concluyó.
La violencia escaló en varias partes de República Democrática del Congo en 2015, lo que obligó a dos millones de personas a abandonar sus hogares solo en 2017.
Entre otros países que este año figurarán en la lista de las Crisis de Desplazamientos más Desatendidas del Mundo están los territorios palestinos, Myanmar (Birmania), Yemen, Venezuela y Nigeria.
Traducción: Verónica Firme