MÉXICO: Internet, farmacia minada de peligros

México prepara medidas para regular la venta de fármacos por Internet: se anuncian reformas a leyes de la década de 1980, cuando la red mundial de computadoras ni siquiera existía, y nuevos sistemas de vigilancia para saber quién, cómo y qué se vende en la web.

El etiquetado de los medicamentos es crucial para comprobar su legalidad. Crédito: Dominio público
El etiquetado de los medicamentos es crucial para comprobar su legalidad. Crédito: Dominio público
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La venta de medicamentos en Internet, de la que participan miles de oferentes, crece al amparo de precios bajos, ausencia de prescripción médica y una supuesta garantía de anonimato. Pero los medicamentos que se compran pueden estar adulterados, haber sido robados, contrabandeados o simplemente vencidos y, en el peor de los casos, tener compuestos peligrosos y hasta mortales.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que 10 por ciento de las medicinas que se venden en el mundo son falsas, aunque en algunos países en desarrollo esa proporción llega a 25 por ciento. Y también lo son la mitad de las que se venden en sitios web que ocultan su dirección física.

Un estudio publicado el mes pasado por la Alianza Europea para el Acceso a Medicamentos Seguros afirma que 62 por ciento de los fármacos que se venden en línea son falsos o no cumplen normas mínimas de salubridad, incluyendo los destinados a tratar graves dolencias cardiovasculares, respiratorias, neurológicas y psíquicas.
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Noventa y cinco por ciento de las farmacias en línea estudiadas operan de forma ilegal y 94 por ciento de los sitios web no tienen un químico farmacéutico identificado. Más de 90 por ciento de ellos suministran sin receta medicamentos que sólo pueden venderse con prescripción médica.

En México, que tiene el mercado farmacéutico más grande de América Latina y el noveno del mundo, la venta anual de medicamentos representa unos 9.000 millones de dólares. Pero por la comercialización de productos falsos las firmas del sector pierden entre 700 y 900 millones de dólares año.

Además, se reportan periódicos robos de cargamentos, y 40 por ciento de los medicamentos que caducan cada año van a la basura, a mercados ilegales o a Internet.

Gobierno y organizaciones no gubernamentales advierten de los peligros de la venta en la farmacia virtual, pero no se han definido medidas globales contra este negocio, aunque sí hay algunos esfuerzos aislados.

México abordará el fenómeno, si bien autoridades, empresarios y activistas consultados por Tierramérica reconocieron que es muy complicado cerrarle el paso.

Antes de que finalice el año, las autoridades sanitarias mexicanas presentarán nuevos sistemas de monitoreo y vigilancia en Internet. "Habrá un nuevo enfoque para esta realidad", dijo a Tierramérica el asesor de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), Luis Hernández.

Ese cuerpo encargado de velar por la seguridad de los medicamentos está en un "intenso proceso de readaptación" que apunta a vigilar qué productos médicos se venden por la red de computadoras, dijo Hernández.

Además, la Cofepris propondrá dictar una nueva ley general de salud, para reemplazar a la actual, redactada en 1984 y sucesivamente reformada. "La globalización trajo un nuevo enfoque de las prácticas comerciales, por lo que hay que tener una legislación con la visión actual", apuntó.

"Cofepris advierte al público que los medicamentos no son mercancías, que no es como comprarse unos zapatos. Son insumos para la salud, lo que implica un riesgo, así que esta nueva forma de vender por Internet tiene que ser atendida y regulada", señaló Hernández.

Miles de sitios, algunos operando desde México, ofrecen sobre todo fármacos para mejorar el desempeño sexual, antidepresivos y productos para adelgazar y combatir el colesterol.

"México no tiene ahora ninguna regulación para venta de medicinas en Internet, pero la mejor forma es apelar a la conciencia del consumidor con campañas amplias y sacar páginas en la misma Internet que informen sobre los riesgos de comprar", señaló a Tierramérica Héctor Bolaños, presidente de la Asociación de Fabricantes de Medicamentos de Libre Acceso (que no requieren receta médica).

"Hemos visto medicamentos adulterados o que no contienen los ingredientes de la formulación

original y otros con menor cantidad o sustancias tóxicas", agregó.

Para Alejandro Calvillo, presidente del no gubernamental El Poder del Consumidor, muchas empresas farmacéuticas que operan en México patrocinan sitios de venta por Internet y, aunque se quejan de que algunos venden productos piratas y adulterados, finalmente "para ellos es parte del negocio, es la forma de posicionar sus marcas".

La OMS desalienta la publicidad de los medicamentos, pero en este país se publicita de forma abierta y además "a través de una propaganda que hasta crea enfermedades para así vender más y más", declaró Calvillo a Tierramérica.

En este país de 104 millones de personas, con 70 por ciento de su población que se autoprescribe, funcionan 224 laboratorios que pertenecen a 200 empresas, 46 de ellas corporaciones de capitales mayoritariamente extranjeros. Sus fármacos se venden en supermercados y en unas 23.000 farmacias.

México es un buen mercado para el sector, por su perfil poblacional. En 1970, los mayores de 65 años representaban cuatro por ciento de la población. Para 2025 serán 15 por ciento y la expectativa de vida se elevará a 81,6 años para las mujeres y a 76,8 para los hombres.

Las farmacéuticas saben que, a mayor edad, mayor demanda de servicios de salud y medicamentos.

"Sé que por pudor muchos adultos se animan a comprar Viagra (medicamento para la disfunción eréctil) por Internet, contra eso es difícil luchar, pero hay que advertirles de que pueden estar en peligro", manifestó Bolaños.

En 2004, la DEA, la agencia antidrogas de Estados Unidos, detectó en una investigación mundial que en México había cerca de 200 farmacias que vendían por Internet, la mayoría asentadas en la frontera binacional. Desde esos sitios se vendían versiones adulteradas de Viagra y de algunos narcóticos.

Según el estadounidense Center for Medicine in the Public Interest (Centro para la medicina de interés público), en 2010 el valor mundial de las ventas de medicamentos falsificados ascenderá a 75.000 millones de dólares, lo que representará un incremento de más de 90 por ciento con respecto a 2005.

"Internet, donde los sitios aparecen un día y desaparecen al otro, es un excelente lugar para vender la medicina adulterada. Los consumidores deben ser informados de esto porque está en juego su salud, y las autoridades deben vigilarlo al máximo", señaló Bolaños.

* El autor es corresponsal de IPS. Este artículo fue publicado originalmente el 12 de julio por la red latinoamericana de diarios de Tierramérica.

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